(No te piques, si no está el tuyo)
Como es nuestra insana costumbre, salimos con diez
días de retraso, pues la idea inicial era ver la luz nuevamente, tras nuestro
autoexilio, ni bien concluyera el primer semestre del presente año, para
comentar las obras más interesantes del panorama nacional.
Tras siete años de actividad del blog, con cinco
publicaciones físicas de por medio, decidimos ponerle punto final a esto, pues
nuevas funciones laborales se apoderaron de gran parte de nuestro tiempo,
imposibilitando seguir escribiendo de música, pero jamás dejar de escucharla.
Así que el “bicho” de escribir nunca feneció, por eso la razón de este recuento
de medio año, aunque solo sea una publicación efímera, que no volverá a replicarse
por largo tiempo, quizás otra revisión, pero de fin de año, sea lo más
apropiado.
Bueno, aquí nuestra relación de discos
nacionales…
BATECAÑA
Desde Cajamarca, este grupo de rock ecléctico,
simplemente recrea su propio estilo, aunque podemos reconocer influencias
cercanas al “ska”, a lo largo de sus siete desenfadadas canciones, todas
sumergidas en un espíritu festivo, rebelde e irreverente, es decir “punk”, pero
donde también hay espacio para actos melódicos como “Doña Martha”.
FM
La Flor
Records
El cuarteto conformado por Manu Feng (Voz),
Renzo Bass (Bajo), Bruno Rey (Batería y Coros) y Bruno Angulo (Guitarra Líder)
marca su debut en sociedad, con una auspiciosa obra de ocho actos homogéneos, que
navegan entre las mareas del pop melódico, donde los trazos “dream pop”,
arrebatos “shoegaze” y ráfagas “noise”, se suceden espontáneamente, destacando
en todas, su dinámica sesión rítmica, impulsada por un cadencioso bajo, y sus
cromáticos arreglos de cuerdas.
POSTERS
IVÁN
CASTRO Y RADIOPOSTALES
Iván Castro reformula su proyecto
Radiopostales -además, de alargarle el nombre- con su confesional e
introspectivo paso solista expuesto en sus anteriores EPs, donde llaman la
atención sus guiños “hard rock”, “latin rock” y psicodélicos, todos en clave
“vitange”, como los contagiosos "riffs" y envolventes “wah wah” de “Noticiero” o
la retro “Manifiesta”, de la misma forma la experimental “Caminito” donde
ensaya con el “hip hop” para enfatizar sus ideales anti xenófobos. Otro
postulado de la obra de Castro, radica en sus líricas de rasgos narrativos.
CURSES
PUTZY
Blossom
Records
Si
bien esta dupla conformada por Rafael (guitarras y sintetizadores) y César
(bajo) definen a su propuesta como “funeral pop”, lo suyo es combinar el
revival “post-punk” matizado con otros estilos, como el progresivo, "gothic", industrial, "post-rock", "noise", "shoegaze", entre otros estilos, a lo largo de sus nueve cortes
instrumentales, inmersos en ambientes gélidos, tétricos y desgarradores, como
en “Kun” para citar un ejemplo. Desolación,
nostalgia, terror, son tan solo algunos sentimientos que se experimentan
durante la escucha de este apesadumbrado registro, salvo el halo de esperanza
que ofrece “A Better Place” o la paranoia sonora motivada por el ruido
atmosférico y abrasivo en “del”.
CLANDESTINO
Álbum debut de estos muchachos amantes del
punk melódico y vertiginoso, con un sonido potente, dinámico y vigoroso, además
de unos guitarrazos y tarolazos que resultan contundentes, prestándose de
manera adecuada para la vociferación de sus consignas, proclamas y manifiestos,
sin tapujos, como ese “Perú campeón, es
el grito que embrutece la nación”. Lejos de ser una banda de punk ortodoxa
y poco prolija, que incluso se da maña para coquetear durante varios pasajes
con el “heavy metal”, Clandestino recala su espíritu rebelde en el virtuosismo
de sus integrantes: Rolando Escaró (Voz - segunda guitarra), Renzo Escaró
(Primera guitarra), Cristhian Aguilar (Bajo) y Diego Ramírez (Batería). Clandestino nos hace
creer que “el rock no ha muerto”.
VUDUFA
Kriolla
NetLabel
La dupla de hip hop experimental Pounda &
NoModico es la que está detrás de este cautivador proyecto de percusiones
afroperuanas tamizados por sonoridades etéreas y electrónicas, resultando
embriagadora su audición a lo largo de sus ocho “tracks”, cuyos títulos han
sido nombrados con olvidados afronegrismos. Pistas donde cajones, quijadas de
burro, campanas, zapateos, las voces de Nicomedes o la guapura Martín Lavalle,
comulgan con “beats”, “synths”, “bass”, para fusionarse y reinventarse en temas
de corte "house", "tropical" y "techno".
Quizás los temas que van más allá, del solo
fusionar percusiones y artilugios electrónicos, están las piezas de cierre, como
los enigmáticos ambientes de “Brutal Macala”, o el denso techno de “Burrufao e
o Chocolate”.
PARAHELIO
La Flor
Records
Melodías
melancólicas, reflexivas y perturbadoras, se confabulan para ofrecernos viajes atmosféricos,
merced a las guitarras, bajo y percusiones que el grupo arroja a través de sus
tres prolongadas piezas, cuyos ambientes sonoros evocan cosas hechas por gente
como Explosion In The Sky o Sigur Rós, tal como lo sentencia su epónima pieza
inicial.
La
jornada atmosférica prosigue con “Gestos y distancias” otra una invitación
hacia la nostalgia surreal, animada por su melancólico a bosque de guitarras, distorsiones,
chirridos y acidas guitarras. Concluye, “Ha’dam” donde platillos y resonancias
siniestras nos amenazan con introducirnos a un ambiente catastrófico,
resultando atronadores, las portentosas y galopantes percusiones, junto a una
estampida de platillos, dispuestas a sacudirnos del solaz, pero luego la pieza
muta hacia la quietud que, tras prolongadísima calma, la bulla ambiental retoma
el relato sónico para alterar nuestros estados, y dejar por ahí algunos ensayos
shoegaze.
El
álbum a decir de sus autores, “busca exponer una realidad decadente y cruda,
inspirada en La Rinconada, un pueblo minero de Puno en el que la contaminación,
ilegalidad, extrema pobreza y explotación sexual de niños y mujeres son temas
cotidianos”, a ello se debe su dramática sonoridad.
Sin
duda, estamos ante un debut más que auspicioso por parte de estos muchachos,
cuyo rock instrumental, cargado de simbolismo, les tomó tres años esculpir.
ELECTRICIDAD
CVLTO AL QÓNDOR
Drone Records
Miguel
Ángel “Chino” Burga, uno de los integrantes más “visibles” del trío, gracias a
su paso por múltiples y queridos grupos del underground peruano, se ha
entregado en cuerpo y alma (y exclusividad), al proyecto emprendido en conjunto
con “Dolmo” Flores (Guitarra) y Aldo Castillejos (Batería [ahora radicado en
U.S.A]), y producto de ello nos entrega su segundo, y ambicioso, trabajo.
Tres prolongados
actos sonoros conforman esta nueva obra de Cvlto al Qóndor, los cuales poseen
características en común y definidas, es decir extensos preludios, progresivos ascensos
y descensos sonoros, en magnitudes, que si bien son atmosféricas, conservan un
minimalismo y sencillez, que sorprendentemente resultan hipnóticas. Un registro
donde los “delay” y demás arreglos de guitarra se reducen a su mínima expresión
en comparación con su placa debut, pero donde las cuerdas de “Dolmo” se las
arregla para seguir generando esa sensación de recorrer parajes surrealistas. Me atrevería a decir que estamos ante un disco
aún más “drone” que el anterior.
“E 1”
alza vuelo con sus sintetizadores, teclados, o lo que fuera el sonido
electrónico inicial, junto a una repetitiva nota de bajo, que va dejándose
envolver por una serie de progresivas cuerdas, que con el transcurrir de los
minutos, se suceden voces fantasmales, y otros arreglos que erigen una aura misteriosa, tras casi
siete minutos sin salirse del patrón sonoro, salen expulsados, “riffs” y guitarras
atmosféricas, retorcidas y abrasivas, para trastornarnos la mente e impulsarnos
hacia el delirio. El siguiente tema “E 2”, arranca con un “taca taca” a lo The
Edge, sucediéndose guitarras pulcras y bajo resonante, acompañados por una efectiva
base rítmica, armonizando una pieza sencilla, pero envolvente, y como es la
costumbre de CAQ. Tras su prolongado preludio, saltan sonoridades volátiles, concibiendo
ambientes oníricos y alucinógenos, para emprender mutación hacia sonidos más
densos, hasta descender a tierra, tras doce minutos de lisérgico ascenso. Finalmente,
la prolongadísima “Catedral (E 3)” ( de 25 minutos de duración) se inicia con un cavernoso
bajo, sombrío y denso, seguido por guitarras que acompaña su oscura ambientación
que parece conducirnos a situaciones tétricas, donde tempestuosas cuerdas, de
rasgos crípticos, arreglos de tambores, etéreos, y guitarras que inician vuelos
siderales, que concluye como empezó el disco, con sonidos de teclados, con
electricidad, que fluye al compás de bajo, batería y guitarra, tan simple y
elemental, pero capaz de causar estragos en nuestra humanidad.
La
edición en Cd, traerá un “bonus track”, “Monitor”, tema rescatado por Burga, de
lo hecho en los 90s como Espira, y presentado en el 8vo Espacio Fundación
Telefónica, pista que captura su paso por la movida Crisálida Sónica, dando
gala de sus influencias “shoegaze” y psicodélica, y los toques siderales que “Dolmo”
le otorga a las guitarras de Culto al Qóndor.
Al
picarme la curiosidad por saber que decía Wikipedia sobre “drone”, me dio
gracia al leer en la respectiva ficha técnica, “popularidad: escasa”, claro,
esta no es música para las masas, ni aún minorías, sino para devotos, quienes
hayan espiritualidad y quietud en medio del caos, y escapismo en medio de la confusión
de ambientes psicodélicos.
DISTORSIONES
ÓSEAS
SPECTO
CALIGO
Buh
Records
Claustrofóbico, cavernoso, oscuro y por ratos
espeluznante, son los rasgos sonoros de este demo tape de ocho pistas, recreado
por Angélica Carlos (Voz, percusión y efectos), Raúl Vega (Guitarras y bajo), Fernando
Pinzás (Bajos y sintetizador) y Herrmann Hamann (Baterías, percusión metálica y
sintetizador), banda que hace su debut con su trabajo titulado “Specto Caligo”
(vislumbrar la niebla, en latín).
La visceralidad industrial de referencias Einstürzende
Neubauten, asoman en la oscura pieza inicial que da nombre a la obra. Luego, el
amenazador “death rock” de “La danza” irrumpe con todo, envolviéndonos con sus
corrosivas guitarras y cadencioso bajo, para luego filosas guitarras y
tenebrosos arreglos de bajo, nos laceren los sentidos en la incendiaria “Burden”,
pieza que poco a poco nos va minando el ser, además de la angustiosa
interpretación de su vocalista. Más guitarras ruines irrumpen en la densa “Atrocity”,
mientras que “Sombras” y “Paralysis” nos presentan ambientes festivos propios
de la “bat cave club”. Ambientes infernales y apocalípticos son recreados en “Séptimo
Sello”. Finalmente, si pensábamos que ya habíamos sido llevados hasta el
averno, “Camélidos Endemoniados” nos conduce hasta sus profundidades, bebiendo
de la Siouxsie o del Bauhaus más macabro, aterrador desenlace para un registro
pleno de oscuridad. Como lo afirma su propio sello, “un sonido visceral que los ubica como dignos representantes de una
nueva escena oscura en Lima”.
COLORS OF THE SUNSET
Lee nuestra reseña aquí
http://tesorosenlatierra.blogspot.com/2019/03/the-colors-of-sunset-silvania-resena.htmlSUKHA
PUNA
Chip Musik/Dorog Records
Lee nuestra reseña aquí...
22/09/1953
ZETANGAS
AND THE MONSTER OF COMIDA
Lee nuestra reseña aquí...
http://tesorosenlatierra.blogspot.com/2019/03/22091953-zetangas-and-monster-of-comida.html
http://tesorosenlatierra.blogspot.com/2019/03/22091953-zetangas-and-monster-of-comida.html
PANSPERMIA
ASTRONAUT
PROJECT
Si
bien Alberto Zegarra ha acoplado más gente a su proyecto, como Eduardo Albareda
(Guitarra), Lucía Tagata (violín), “Kaboogie” (Bajo), Paula Marissa (Teclados)
y Carlos Freyre (Batería), para sus presentaciones en vivo, su tercera entrega
ha sido ejecutada y producida en su totalidad por su persona, y en esta nueva
aventura reúne sus diversas influencias, que van del pop más cándido, hasta la
corrosividad sintética, dejándose escuchar a lo lardo de sus doce pistas trazos
“dreampop”, “indie”, “rock”, “industrial”
y de “electrónica”.
El nombre
del disco tiene su raíz, en la hipótesis que la vida en la tierra es de origen
extraterrestre, y su fecha de lanzamiento coincidió con la del último eclipse
solar. Sobre el concepto del álbum, Zegarra ha señalado que “habla sobre el contacto que ha tenido la
raza humana con seres interdimensionales y que muchas veces han estado
presentes en momentos importantes de nuestra historia. El ser humano en su afán
de explorar los confines del universo está revelando las respuestas de su
propia existencia”.
La
intro de rasgos ufológicos, “DSIIDFYTEBCTANH”, con sus audios de mensajes
codificados, nos advierte la presencia de seres que no son humanos, y nos
prepara para lo que será el resto de la obra, prosigue los audios del famoso
discurso de JFK Kennedy de enviar el hombre a la Luna en el tema “Reptilian
Song”, primer single del álbum, cuya música recoge las diversas influencias de
Zegarra, acá encontramos percusiones industriales, sonoridades electroacústicas
y coros ensoñadores, cohabitando lo misterioso con lo cándido.
En el
correcto interludio “TV”, asoman los audios de astronautas comunicando a la
NASA sobre la presencia de extraños objetos, sobre bellas y lúdicas ambientaciones
sintéticas, para preludiar la simpática “Volver”, pieza de “synthpop” veloz y
armonioso. La balada sintética, tan presente en su disco anterior, hace su
aparición con la conmovedora “Forever”, cuya progresión avanza hacia
sonoridades más atmosféricas, irrumpiendo distorsiones hasta mutar en una pista
dance. La electroacústica e introspectiva “In Mortal”, es otra jornada hacia la
nostalgia. Misteriosos teclados, junto a implacables “pads”, van construyendo
una ambientación siniestra en “Planet X”, corte de rasgos sombríos, donde la
singular interpretación de Zegarra, la entenebrece aún más. En “Blue Hole” la
melancolía sale a relucir entre tiernos arpegios. “Adicción”, nos mete de nuevo
a esa mundo maquinal y corrosivo, de rasgos Ministry y Nine Inch Nails, tan
adorado por el músico, además de sumarle la voz del líder de la secta “Heaven´s
Gate” invitando a salvarse del fin del planeta en la canción para hacer más
perturbadora su escucha.
“Friends
in the stars”, nos retorna a los campos melódicos de refrescante pop, acompañado
por el audio del famoso discurso de Carl Sagan sobre ser sólo un punto pálido
azul en la vasta arena cósmica. Cerrando “Love”, para movernos el corazón, y “Reflejo
de Luna”, cuya mistura de cuerdas electroacústica y sintetizadores, nos
transportan hasta un ambiente que nos ubica en medio de la inmensidad del espacio.
INMERSO
EN EL ANDE
SATÁNICOS
MARIHUANOS
Foto: Cristian Belano |
La segunda entrega de esta banda de “doom
metal”, se convierte sinceramente en un paso gigantesco, pues sin dejar su
sonido denso y pesado, el trío potencia su sonido con guitarras más corrosivas
y percusiones atronadoras, rozando con el “psych” y el “heavy metal”, donde su
demoniaca propuesta cala en la profundidad del alma, rasgos que se dejan sentir
desde “Inmerso en el Ande”. Prosigue el ensordecedor “fuzz” de “Bosques de
Piedras”, que luego alternarse con misteriosas ambientaciones dirigidas por un
claustrofóbico bajo, y afiladas distorsiones, que finalmente nos arrojarán a
los infernales gritos de Tania Duarte (Reino Ermitaño) y una artillería de
percusiones y guitarras demoledoras. Los envolventes redobles y solos de
batería en “Amaru”, nos aprestan para ser sacudidos por tortuosas guitarras y
los espeluznantes alaridos de Úrsula Inga y Tania Duarte, ni qué decir de ese
duelo final entre cuerdas y percusión.
Las cripticas cuerdas de “Catacumba”, suenan
fabulosas, así como sus sonoridades “heavy metal” y los ritualistas arreglos de
teclados que los acompañan, y nuevamente Tania Duarte emulando la voz del
demonio desde las profundidades del averno.
Las cuerdas cavernosas y amenazantes de “La
sombra del más allá del tiempo” resultan intimidantes, además de entregarnos a
un ambiente de borrasca y nuevamente la aterradora participación de Tania
Duarte en voces, amenizando nuestra jornada hacia el submundo. Cierra “Yukai”,
con sus ensoñadoras cuerdas, tras un recitar de aves, que se prolongarán para
sedar nuestro angustioso viaje en el tiempo, resultando catártica su sonoridad.
Broche perfecto para tremendo disco.
El concepto del álbum busca honrar al antiguo
hombre andino, su naturaleza y cosmovisión, así como sus deidades, e introducirnos
en sus mundos paralelos y de misteriosa religiosidad. Sin duda, estamos antes
una de las obras cumbres del rock pesado hecho en el Perú.
SYNTHEXCESS
SAJJRA
Buh
Records
Las
epifanías sonoras de Chrs Galarreta, bajo el seudónimo de Sajjra nos vuelve a
entregar otra obra de vanguardia, esta vez titulada "Synthexcess",
donde convergen lo vernacular (andino) con la electrónica, el ruidismo, y aún
el pop, para entregarnos seis actos de texturas etéreas y abstractas, ideales
para el trance y vuelo por parajes psicodélicos, como solo el músico nacional
radicado por años en Rotterdam (ahora por el momento en Stuttgart, Alemania)
sabe conducirnos.
Cada
una de sus piezas resultan tiros contundentes al cerebro y azotes sonoros para
el cuerpo, que definitivamente al escucharlos alteran nuestros estados y
sentido de la realidad, resultando imposible ser indiferentes ante tremenda
descarga musical que en esta ocasión el músico nos presenta con colosal esmero.
La
estridencia electrónica de “Maldita Kolmena”, nos envuelve instantáneamente con
sus potentes percusiones y “loops”, minándonos la piel, dejándose oír el
angustioso canto de Galarreta a través de un vodocorder, además que nos somete
a su contundente ritmo, sacudiéndonos de
un lado a otro, con música que roza entre el tecno y lo industrial, ofreciéndonos
también momentos de tregua, donde la avalancha sonora desacelera mutando hacia
ambientes plenos de distorsiones y sonidos corrosivos, para luego retornar los
mazazos sintéticos hasta su colapso, donde la pieza sucumbe contra una melodía
de pop vanguardista, liderada por cuerdas electroacústicas.
Otra
alucinada de Galarreta arriba con la reconstrucción de la tradicional “Falsia”,
de Emilio Emilio Alanya Carhuamaca, pista de electrónica dancística, aceleradísima
y arrolladora que, si bien no repite los textos originales, creo que persigue
un afán por reivindicar la “sed de justicia” que proclama su lírica, ¿cómo
podríamos clsificar a esta pieza? Hagamos el intento: ¿electrónica-vernacular-subvervisa?
En
medio de una ambientación siniestra y misteriosa, surgen la desolada guitarra
de “Koncielo”, fluyendo música que oscila entre lo etéreo y el noise, recreando
paisajes surrealistas, ideales para anhelar el trance. Atmosféricas sonoridades del Mantaro surgen
progresivamente, hasta acosarnos y llevarnos al delirio en “Huaykoloro”, que
nos trasporta por los andes al son de huayno y su ritmo embriagador, donde
Galarreta bebe del tema “Aguas del Río Rimac” de Víctor Alberto Gil Mallma, “El
Picaflor de los Andes”, para crear una obra de avanzada. Sigue el ensayo
electro-noise-gaze (tomado de los My Bloody Valentine) y post-tecno (de su
faceta Evamuss) para concebir la demoledora, y cíclica, “Tarish”.
Cierra
este psicodélico e increíble viaje, “Synthetism and excess”, cuyos galopantes y
aplanadores “loops” y “beats”, acompañados por el manifiesto de Chrs, reproduce
música abrasiva, patea cerebros, furiosa e intempestiva, donde finalmente somos
atropellados por feroces ráfagas ruidistas, sello perfecto para tremendo festín
lisérgico que nos ha ofrecido este ser sonoro.
Este
disco sentencia la carrera ascendente que la música de Galarreta ha
experimentado a través de su faceta como Sajjra, que personalmente la concibo
superior a las obras presentadas con sus otros alias. También, percibo que este
registro en cierta manera tiene un espíritu subversivo, que busca reivindicar
la riqueza de lo tradicional, al experimentar con el huayno y una afilada
electrónica. Sajjra pues, está a años de distancia del resto, es música de un
futuro aún lejano por estos lares.